jueves, 21 de junio de 2012

Todo tiene un comienzo

Tantas "Tailandias" como personas la experimentan. 
Ésta que descubriré y mostraré será una, la mía. Mi visión de las cosas, mis experiencias, mis risas, mis observaciones, mis inspiraciones, mis paisajes...

Las cosas a veces no salen como uno las plantea, hay impedimentos, obstáculos que nos complican el camino...

Este año ha sido uno de esos en el que casi nada ha salido como pensaba; unas oposiciones paralizadas me han echado por tierra muchos de mis planteamientos... "¿Y ahora qué?" ha sido la eterna pregunta que me ha rondado la cabeza una y mil veces.

Pues resulta que la vida te quita, pero también te da.

En los dos últimos años me ha quitado mucho, muchísimo. Por eso valoro tanto lo que sí tengo y a los que sí están. Pero también me ha dado cosas buenas. Entre otras, me ha dado la posibilidad de volver a mi niñez, a los años de guardería, de preescolar...todo esto de la mano de mi primera amiga (¡teníamos 2 años cuando nos conocimos!) y de otros tantos estupendos amigos que, aún en la distancia o con algún reencuentro de por medio, me han hecho recordar aquellos tiempos taaaan felices.

Y es con ella, mi primera amiga, con quien me embarco en este aventura de 36 días. 
A pesar de haber pasado trece años separadas, nos unen muchas cosas, y ésta es una de ellas: viajar por amor al arte y añadirle algo que nos haga sentir que ese viaje es y será especial. En este caso ese "algo" es un orfanato de niños y niñas discapacitados en Bangkok.

Por aquí podréis ver lo que yo veré, trataré de haceros llegar los olores, colores, sabores y emociones que allí encontraré.

Llena de ganas y buenos deseos, trato de ponerle un toque dulce a esta rachilla que me ha tocado vivir. Comienzo mi equipaje. Empieza la cuenta atrás. Mis ángeles de la guarda me acompañan, como siempre. Esto pinta muy bien.

Echaré de menos a muchas personas. Os echaré de menos. Te echaré de menos... ♥